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Ante la pertinaz sequía que ha asolado, y que sigue afectando, a los cultivos de toda España, la utilización de los pluviómetros se convierte en esencial como instrumento clave para medir la cantidad de precipitación caída (líquida o sólida) en un determinado lugar y por un periodo de tiempo concreto. Pese a que existen muchas tipologías de pluviómetros, debes saber que todos expresan sus valores en ‘milímetros por precipitación’ (mm).

Independientemente del tipo de pluviómetro, todos funcionan del mismo modo. Se compone de un recipiente cilíndrico vertical, con una abertura en la zona superior por donde se introduce la precipitación. Posteriormente, el cilindro culmina en una especie de embudo que en el extremo inferior tiene una espita. Al abrirse, toda la lluvia recolectada pasa a un colector graduado.

La cantidad de agua almacenada indica la altura alcanzada por la capa de agua caída en un metro cuadrado de superficie, un valor común para todos los tipos de pluviómetros del mercado. Normalmente, la base del cilindro es de 0,1 m2, por lo que un litro de agua recogida en el recipiente equivale a 10 mm de lluvia, siendo la capacidad máxima media de 400 mm de precipitación.

Pese a que miden la lluvia, el granizo o la nieve, los diferentes tipos de pluviómetros no son capaces de percibir ni la neblina ni el rocío, ya que son gotas muy pequeñas y es imposible llegar a medir con las marcas del recipiente colector.

Tipos de pluviómetros

En el mercado existen diferentes tipologías de pluviómetros, en función de las necesidades del cultivo y del propio usuario.

Manuales

Son los más comunes. Esta tipología de pluviómetro consta de un recipiente cilíndrico, que suele ser de plástico, dotado de una escala graduada. La altura alcanzada por el agua será equivalente a la cantidad de precipitación caída y se mide en mm.

Totalizadores

Se trata de unos artefactos capaces de recoger la precipitación con la ayuda de un embudo, a una altura determinada del suelo. El agua recircula hacia un recipiente graduado, aunque el operador deberá medir el agua caída cada 12 horas.

Son más precisos que los pluviómetros manuales, aunque este tipo de pluviómetros no permiten conocer las horas exactas a las que se produjeron las precipitaciones.

De sifón

Los pluviómetros de sifón son una tipología conformada por un tambor que gira a una velocidad constante, arrastrando un papel graduado. Así pues, permitirá fijar un doble registro en un eje de coordenadas (el de precipitación en la ordenada y el del tiempo en la abscisa). Toda la información queda grabada con una pluma sobre el papel, accionándose con la ayuda de un flotador.

Al no haber precipitaciones, la pluma dibuja una línea recta horizontal. No obstante, al llover, el agua caerá dentro del embudo y se alcanzará el recipiente y se levantará el flotador. Entonces, la pluma de este tipo de pluviómetro marca el nivel de elevación del agua. Permite conocer el tiempo en el que se produjo la precipitación, con elevada precisión.

De doble cubeta basculante

Es un tipo de pluviómetro que recolecta agua en un embudo y la lleva hasta una cubeta triangular doble, la cual posee una bisagra en el punto medio de equilibrio. Al juntarse una determinada cantidad de precipitación, se genera un vuelco y la mitad se vacía a la par que la otra comienza a junta agua desde cero.

Hellmann

Con este tipo de pluviómetro se garantiza el cumplimiento de la normativa de la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Para ello, existen dos vasos de aluminio acoplados entre sí. El recipiente interior recogerá el agua colada por el embudo y el depósito interior permanecerá aislado de las paredes para evitar que se calentase y se generasen pérdidas por evaporación.

La mejor opción

La mejor opción, en cuanto a tipología de pluviómetro será el modelo RG22. Desde Prismab te presentamos un modelo eficaz capaz de optimizar el riego y conocer el impacto real de la lluvia en el suelo. Se podrán ajustar los programas de riego y mejorar el rendimiento de los cultivos al comprender las condiciones de humedad.

Con la tipología de pluviómetro RG22 es posible mejorar el rendimiento de los cultivos, reduciendo los costes operativos y facilitando la toma de decisiones Además, se aumentará la sostenibilidad ambiental al promover el uso responsable del agua.

No hay que olvidar que este tipo de pluviómetro permite la recopilación y análisis de datos a largo plazo, ayudando a predecir patrones climáticos y a planificar las temporadas futuras de manera proactiva.

Con Prismab, y su eficiente pluviómetro, será posible conocer el impacto real de la lluvia, que es un fenómeno que no se produce de manera homogénea en todas las superficies. El RG22 es una herramienta esencial para cualquier agricultor moderno, ofreciendo mediciones precisas y fiables de la precipitación y un mayor control sobre las condiciones de cultivo.

Sergio Delgado Martorell

Periodista y consultor en marketing con 10 años de experiencia trabajando para empresas del sector agrícola y tecnológico. Aportando contenido y soluciones, tanto informativas como de posicionamiento, para empresas del sector. Apasionado del mundo tecnológico y su aplicación en la mejora de la gestión y la comunicación del sector agrícola

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