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¿Has notado que tus plantas tienen una mala apariencia? ¿Crees que puede haber una necrosis? Esto lo puedes detectar cuando las hojas se vuelven de un amarillo amarronado que se expande por el resto generando su caída. En muchas ocasiones, ese color puede volverse negro y, tal vez, creas que esto se deba a algún hongo que está afectando a tus plantas. Pero, ¿has comprobado que no sea clorosis férrica?

¿Qué es la clorosis férrica?

La clorosis férrica provoca estos síntomas que hemos descrito en tus plantas y la razón de ello es la falta de hierro. Siempre insistimos en PRISMAB en lo importante que es verificar la calidad del suelo dónde se realiza la plantación de un cultivo, así como las necesidades particulares que van a tener las plantas. Esto se debe a que van a necesitar unos requerimientos concretos de vitaminas y minerales para su adecuado desarrollo.

Cuando hay una falta acusada de hierro, la clorosis férrica empieza hacer efecto en las plantas. Sus hojas se vuelven amarillas porque no están recibiendo los nutrientes que necesitan y esto puede provocar su muerte. Por lo tanto, hoy en PRISMAB queremos hablar de las diferentes formas en las que esto se puede prevenir y cómo solucionarlo. ¿Hay vuelta atrás cuando la clorosis férrica ya ha hecho efecto?

Los sensores de suelo de PRISMAB

Los sensores de suelo que tenemos en PRISMAB son óptimos para realizar las comprobaciones adecuadas antes de trabajar sobre un terreno. Gracias a este tipo de tecnología para agricultore es posible saber si el terreno tiene un pH elevado o es poco impermeable. No hay que asustarse al recibir este tipo de datos, ya que cualquier suelo puede prepararse para que los cultivos sean fructíferos.

Para ello, a pesar de aplicar el abono correspondiente, airear la tierra y realizar las comprobaciones pertinentes sobre sus características, es indispensable hacer un seguimiento con los sensores de suelo de PRISMAB. De esta manera, se mantendrá siempre un equilibrio de nutrientes (sobre todo de hierro), también de la humectación del propio suelo, y todo esto mejorará sus condiciones.

Al cuidar del suelo de una manera tan controlada, algo que solo permiten los sensores como los de PRISMAB, será difícil que la clorosis férrica termine afectando a las plantas. En cuanto los niveles de hierro se detecten por debajo del umbral de lo recomendado (en suelos calizos esto es bastante habitual), se podrán tomar medidas para paliar los nocivos efectos que esto puede tener en tus plantas.

Clorosis férrica avanzada, ¿qué se puede hacer?

Una vez que la clorosis férrica ya ha tenido su impacto en las plantas es fundamental tomar medidas rápidas. Lo importante es detectar aquellas que ya están en un estado de necrosis. Lamentablemente, en este estado no se pueden salvar, a menos que tengan necrosadas solo algunas hojas que conviene retirar cuanto antes. Después, se realizará un seguimiento para ver cómo es la evolución.

En aquellas situaciones en las que las plantas con clorosis férrica no se hayan necrosado, pero ya presenten una coloración amarillenta en las hojas conviene centrar los esfuerzos en mejorar el suelo. Ya hemos dado algunos consejos sobre ello y es que hay que intentar reducir ese pH con fertilizantes adecuados. Asimismo, los sensores PRISMAB ayudarán a verificar que los parámetros están mejorando.

La clorosis férrica afecta a la síntesis de clorofila

La clorosis férrica repercute de manera importante en las plantas afectando a la síntesis de clorofila. Es por eso por lo que las plantas empiezan a morir y si no se corrige el problema desde el primer momento en el que se detecte, el cultivo puede estar condenado a perderse. Esto demuestra la gran importancia que tiene el suelo en el momento de cultivar y, por eso, es fundamental prestarle la mayor atención posible.

En PRISMAB utilizamos la tecnología como una forma de ayuda en estos casos donde la clorosis férrica puede echar por tierra meses de trabajo. Aunque, si el suelo está mal desde un comienzo, puede que el desarrollo de las plantas no se llegue, tan siquiera, a producir. Por tanto, resulta indispensable utilizar la tecnología para mejorar el control del terreno y que, así, las plantas tengan un desarrollo esperado.

Sergio Delgado Martorell

Periodista y consultor en marketing con 10 años de experiencia trabajando para empresas del sector agrícola y tecnológico. Aportando contenido y soluciones, tanto informativas como de posicionamiento, para empresas del sector. Apasionado del mundo tecnológico y su aplicación en la mejora de la gestión y la comunicación del sector agrícola

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