Skip to main content

Los sistemas de riego por aspersión llevan el agua que los cultivos necesitan simulando un efecto de lluvia. El agua viaja por tuberías y gracias a la presión que se ejerce sobre ella (con una bomba) sale a través de unas boquillas que producen el efecto de aspersión.

El sistema de riego por aspersión es muy utilizado en todo tipo de cultivos, en terrenos con césped e incluso como sistema de refrigeración. Cuenta con muchos beneficios y consigue un uso maximizado del agua. Estas son las ventajas que trae su uso:

Evita la compactación del suelo. Este problema se debe a una perdida de volumen que se suele producir al instalar elementos de labranza. Esto evita que entre aire y dificulte el desarrollo radicular. Con el sistema de riego por aspersión este efecto no se produce.

Se puede instalar en terrenos ondulados. No necesita nivelación para su correcto funcionamiento. Así se facilita que los sistemas de riego por aspersión se puedan usar en todo tipo de cultivos.

Permite ajustar el riego a las necesidades de cada momento. La cantidad de agua usada se puede modular para conseguir sólo la necesaria. Esto ayuda a conseguir un ahorro y siempre se atiende a las necesidades concretas de los cultivos.

Es perfecto para lograr la automatización de tareas. Una de las principales ventajas de los sistemas de riego por aspersión es que se pueden automatizar. O bien se establecen periodos de tiempo para el riego o se programa para que se active la llegada del agua según el estado del cultivo. Facilita mucho el trabajo de los agricultores.

Se puede usar con todo tipo de suelos. La única excepción son los suelos arcillosos. Los sistemas de riego por aspersión son aptos para casi todo tipo de cultivos y por eso es una de las alternativas más usadas.

Se combina con el tratamiento con fitosanitarios. Los sistemas de riego por aspersión permiten el uso de productos para combatir plagas y enfermedades de las plantas. Es más fácil usar este producto y que llegue a las partes de cultivo afectadas con más facilidad. Lo mismo se puede aplicar con los fertilizantes.

Ayudan a combatir los efectos de las heladas. Los sistemas de riego por aspersión ayudan a que los cultivos no se vean afectados por las temperaturas más bajas. Pueden crear un efecto de microclima que favorece el correcto desarrollo de las plantas.

Consigue una reducción de costes. Con los sistemas de riego por aspersión se consigue cubrir grandes extensiones de terreno. Esto perite que no sea necesario dedicar mano de obra a esta tarea. Logra optimizar el uso de los recursos y obtener mayor rendimiento.

No ocupan mucho espacio. No se tendrá que usar una gran parte del terreno para la instalación. Los sistemas de riego por suspensión permiten maximizar el uso de cultivos sin tener que sacrificar mucha superficie.

Las pérdidas de agua se reducen. Esta es otra de las características que hacen de los sistemas de riego por aspersión perfectos para conseguir ahorro. No existen canales para conducir el agua y esto consigue evitar que se pierda durante el recorrido.

Los sistemas de riego por aspersión son uno de los más idóneos para los cultivos en la actualidad. Con PRISMAB te ayudamos a sacar el máximo partido a tu cultivo gracias a nuestros sensores. En combinación con este sistema de riesgo conseguirás que tu explotación agrícola consiga los mejores resultados.

Contacta ya con nuestro equipo de expertos para conocer todas las posibilidades. Descubre cómo llevar el control de tus cultivos de manera fácil y segura.

Sergio Delgado Martorell

Periodista y consultor en marketing con 10 años de experiencia trabajando para empresas del sector agrícola y tecnológico. Aportando contenido y soluciones, tanto informativas como de posicionamiento, para empresas del sector. Apasionado del mundo tecnológico y su aplicación en la mejora de la gestión y la comunicación del sector agrícola

Leave a Reply